El 73% de los profesionales de RRHH piensan que la formación será clave para el futuro de las empresas

La formación, junto a la digitalización, es una de las mayores preocupaciones

  • La formación se ha convertido en una pieza clave de la digitalización para dotar a los trabajadores de las habilidades tecnológicas.
  • La formación de idiomas crecerá en el 2021 en una era en la que la estrategia de internacionalización de las empresas es un salvavidas para descubrir nuevos mercados.

Según datos de Hexagone 7 de cada 10 responsables de departamentos de recursos humanos piensan que tan importante es la formación de los trabajadores como los procesos de digitalización que se están llevando a cabo en la era del Covid.

La formación en la era de la digitalización

En una época con tantos cambios dentro de las empresas, la formación es más necesaria que nunca para poder dotar a los trabajadores de los conocimientos requeridos para llevar a cabo la transformación de los negocios durante la pandemia.

Desde Hexagone se calcula que 4 de cada 5 compañías cambiarán su modelo de negocio o su forma de trabajar incorporando nuevas habilidades tecnológicas. En este contexto de cambio el 64% de los trabajadores mayores de 40 años se verán obligados a reciclarse o adquirir nuevas habilidades relacionadas con esta transformación digital.

Este es el principal motivo por el que los profesionales de RRHH están inmersos actualmente en la elaboración de planes de formación para los trabajadores. Además de las nuevas habilidades tecnológicas, la importancia de descubrir nuevos mercados internacionales convierte el idioma en una prioridad junta a la formación de habilidades digitales.

La formación como salario emocional

La formación no sólo es una parte fundamental del engranaje de cualquier empresa que ayuda a ampliar conocimientos de los trabajadores para aumentar su productividad. Además, este servicio es fundamental para la motivación de los propios empleados.

Según Hexagone, la formación es lo más valorado por los trabajadores dentro de una empresa después del salario. Dentro del conocido como salario emocional, el 85% de los empleados valoran por encima de todo la capacidad de crecer profesionalmente, y ampliar conocimientos dentro de la empresa.

Gaëlle Schaefer, directora de Hexagone explica, “El salario emocional es un valor determinante a la hora de contratar talento en las empresas. También lo ha sido en las grandes fugas de profesionales. No sólo se trata de ofrecer un sueldo bueno sino también unas condiciones que motiven al trabajador, como flexibilidad laboral, teletrabajo, horarios, y sin ninguna duda un plan de formación que les sirva para crecer profesionalmente”.

La formación como salvavidas de la empresa

Desde Hexagone se apunta a que la formación es el primer sector que tuvo que enfrentarse a la nueva realidad en la que no se podían continuar ofreciendo las clases de forma tradicional presencial.

De la noche a la mañana vivimos cómo las aulas se vaciaron y se decretó un confinamiento y un distanciamiento social que impediría juntar alumnos presencialmente en las clases. Pasamos de un formato presencial a un aula virtual a través de videoconferencias que ha demostrado que ha funcionado”, explica la directora de Hexagone.

Así, la formación ha sido de las primeras en mejorar y acortar la brecha digital entre usuarios, digitalizando su metodología y adaptándose a un sistema a distancia a través de plataformas online.

Las empresas son conscientes de este cambio y buscan en ello la mejor manera de seguir ofreciendo formación a sus trabajadores. La gran apuesta de las empresas por la formación pasa por capacitar a los empleados en tareas relacionadas con la digitalización de los negocios.

En una era en la que se ha impuesto la transformación digital de todas las empresas para sobrevivir, la formación es una pieza clave para desarrollar nuevas habilidades de los empleados en entornos digitales”, explica la directora de Hexagone.

Desde Hexagone además hacen hincapié en la necesidad de tener una estrategia internacional que permita a los negocios abrir sus fronteras para poder ampliar su mercado. Esta internacionalización de los negocios lleva asociada la necesidad de formarse en idiomas para poder comunicarse con otros mercados,

Recibimos solicitudes de formación de idiomas enfocados expresamente en la estrategia de internacionalización de las empresas. Es decir, negocios que necesitan formar empleados para vender sus productos en otros mercados. También la necesidad  de adaptar páginas web, e-commerce, o incluso presentaciones de marca a otros idiomas para así poder vender en el extranjero. También, los servicios de Customer Service viven en España una época de crecimiento. Desde Hexagone se ha detectado un aumento importante de empresas que prestan servicio de soporte desde España pero para otros países. En este caso es necesario hablar en el idioma del país al que se ofrece soporte.” explica Gaëlle Schaefer.

En este contexto, los idiomas siguen siendo una de las formaciones más solicitadas por las empresas que necesitan que sus empleados adquieran estos conocimientos para poder ampliar el mercado de la empresa.

Compartir en: